El economista argentino publicó un libro sobre los movimientos prioritarios del planeamiento estratégico. Aquí parte de uno de sus capítulos."En contraste, quienes no emplean el planeamiento estratégico se ven más expuestos a los riesgos y dificultades cotidianos” 21 de mayo de 2005
“Estratega" es una antigua palabra que deriva de la expresión griega "stratégos". Originalmente era utilizada para referirse a quienes conocían los caminos (en griego stratas) y por lo tanto podían orientar a los viajeros en su travesía por una región.
Para usar términos de origen español, esos primeros estrategas eran como "baquianos" que guiaban a los exploradores, comerciantes, funcionarios y ejércitos que, si bien tenían claro a qué lugar deseaban llegar, no conocían las rutas que mejor los llevaría a su destino.
Quien emprendía un viaje en aquellos tiempos - al igual que las personas y las organizaciones que hoy deciden llevar adelante un proyecto ante todo debía analizar el conjunto de circunstancias que los rodeaban (o que el diccionario de la Real Academia española define como escenario, en su cuarta acepción) para anticiparse a las oportunidades y los riesgos posibles y luego elegir el lugar de destino, in formarse sobre caminos que podían utilizar, seleccionar la ruta más conveniente y, entonces sí, ponerse en marcha.
Esos mismos pasos son los que contempla el planeamiento estratégico, al que podemos definir como un sistema de liderazgo que se inicia con una visión sobre el destino al que deseamos dirigimos y luego selecciona y pone en marcha las estrategias que nos permitirán trasladamos desde nuestra situación actual hasta esa otra que buscamos alcanzar en un futuro determinado.
El planeamiento estratégico es una herramienta estratégica para conducir adecuadamente todo tipo de organizaciones, ya sean públicas o privadas, con o sin fines de lucro o grandes, medianas y pequeñas.
Incluye los siguientes seis pasos: analiza los escenarios para detectar oportunidades y riesgos; define una visión de futuro para fijar el rumbo; selecciona las estrategias o caminos elegidos) para unir el presente con el futuro deseado; asigna una misión a la organización; diseña la estructura adecuada para esa misión; prepara por escrito un plan de acción con los objetivos y cronogramas para cada uno de los integrantes de la organización.la visión de futuro es fundamental. Prever hacia donde nos dirigimos es clave para cualquier proyecto que deseemos implementar.
La visualización de un destino que buscamos alcanzar en un tiempo determinado es una fuerza poderosa que nos impulsa a ponemos en marcha y hacer frente a los desafíos que pueda presentar la travesía.
Como señala Michael Sonnen. feld, especialista en el campo de las organizadores, una "visión de futuro inspira y entusiasma a la mayoría de las personas, especialmente cuando la realización de esa visión permite que experimenten un mayor grado de bienestar". Sin esa visión de futuro no sabremos hacia dónde deseamos dirigimos. Caminaremos sin una dirección y repetiremos el mismo trayecto cotidianamente, con nuestra atención puesta en el presente o lo que es peor, en el pasado.
En estos casos, nuestras conductas serán "reactivas": reaccionaremos frente a los estímulos externos condicionados por las circunstancias que nos rodean. Nuestras conductas serán positivas o negativas, según lo sean esos estímulos diarios. Y, sino hay estímulos, nuestra actitud será pasiva.
El planeamiento estratégico nos permite independizarnos de nuestro entorno y desarrollar conductas "proactivas" mediante las cuales determinamos nuestro propio rumbo.
En contraste, quienes no emplean el planeamiento estratégico se ven más expuestos a los riesgos y dificultades cotidianos. Sus decisiones, en lugar de respaldarse en una visión de futuro, se ven condicionadas por hechos del pasado o son la respuesta inmediata a los distintos acontecimientos diarios. .
GAHAN. Se graduó como economista en la Universidad de California.Gahan, Juan Gandolfo, “Paso a paso”.
En sección Management. Suplemento Sociedad, Diario Infobae. Bs. As. Pg. 12-13.